Conoce nuestro hotel

«Descubre la historia y encanto único del Hotel, donde la elegancia atemporal se encuentra con la comodidad moderna, creando una experiencia confortable.»

Encanto histórico y moderno en el corazón de Lucena.

El Hotel Santo Domingo es un agradable establecimiento perfecto para su estancia en Lucena, una monumental ciudad de la provincia de Córdoba, conocida por su rico patrimonio histórico y cultural. Este hotel con encanto se ubica en un antiguo convento del siglo XVIII, cuidadosamente restaurado para ofrecer una experiencia única que combina la historia y la modernidad.

El edificio conserva su estructura original, lo que permite a los huéspedes disfrutar de una atmósfera auténtica y clásica. Sus instalaciones, sin embargo, están equipadas con todas las comodidades de la hotelería actual, asegurando una estancia confortable y placentera. El Hotel Santo Domingo dispone de 30 habitaciones completamente equipadas con aire acondicionado, televisión de pantalla plana, conexión Wi-Fi gratuita, y baños modernos con todos los servicios necesarios.

Uno de los aspectos más destacados del hotel es su espléndido patio central, un lugar ideal para relajarse y disfrutar de la tranquilidad y la belleza del entorno. Este espacio, lleno de encanto, es perfecto para leer un libro, tomar un café o simplemente disfrutar del ambiente sereno y acogedor.

El restaurante del hotel, “El patio del hotel”, ofrece una experiencia culinaria única. En este espacio, adornado con techos abovedados que evocan el legado andalusí de Lucena, los huéspedes pueden degustar una exquisita cocina que combina platos tradicionales con toques modernos. El menú, cuidadosamente elaborado, incluye una variedad de platos que utilizan ingredientes frescos y locales, garantizando una experiencia gastronómica inolvidable.

Además de las habitaciones y el restaurante, el Hotel Santo Domingo cuenta con varias salas para eventos y reuniones, perfectas para conferencias, bodas y otras celebraciones. El personal del hotel está siempre dispuesto a ayudar y a asegurarse de que su estancia sea lo más agradable posible, brindando un servicio atento y personalizado.

La historia del convento.

Puede considerarse como punto de arranque de la devoción lucentina a San Francisco de Paula la epidemia de peste en el último cuarto del siglo XVII. La Ciudad hizo un voto consistente en la erección de una ermita a este Santo. Para ello un miembro de la familia de las Cuevas donó unas casas, enfrente de las que habitaba, en la calle Batanera, llamada también del Agua.

Posteriormente, en 1695, los religiosos mínimos de San Francisco de Paula de la provincia de Granada solicitaron la fundación de un hospicio y vicaría. El Obispo de Córdoba y la Sra. de Lucena, duquesa de Cardona título originariamente catalán dieron su licencia para efectuar el establecimiento  junto a la ermita, en casas cedidas por el Ayuntamiento. Entre otras condiciones, se acordó que los religiosos estableciesen una cátedra de Gramática para enseñar gratis a los hijos de los vecinos.

El Hospicio se transformó en convento en 1712, con los mismos derechos y privilegios que los demás conventos de la ciudad, ampliándose su edificio. En 1734 se firma la escritura de convenio de patronato de la Ciudad sobre el convento y comunidad de mínimos de San Francisco de Paula.

A principios del siglo XIX, durante la invasión francesa, la casa palacio de los duques de Medinaceli en nuestra ciudad fue secuestrada. El Personal al servicio de estos señores pasó a ocupar el convento siendo los frailes exclaustrados. En 1822 se encontraba también suprimido.

A partir de la exclaustración sirvió del local para la Milicia Nacional, siendo en algún tiempo utilizado por la Sociedad Económica de Amigos del País de Lucena, Institución que influyó en la fundación en el mismo edificio del Colegio de Humanidades de Santa Isabel en 1840.

Después y hasta finales de los sesenta de este siglo fue Casa Cuartel de la Guardia Civil, estando prácticamente en abandono y estado ruinoso hasta que en 1996 comenzó su restauración para convertirlo en hotel. Gestionado desde 1997 hasta 2007 por la cadena hotelera Husa. Desde 2007 ha pasado por varias empresas, hasta que en 2015, los propietarios del edificio tomaron la determinación de gestionarlo ellos mismos.

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